Empieza 2024: los tres deseos de MAFA para la agricultura del nuevo año
Pues sí. Empezamos 2024 y lo hacemos con los mejores deseos para todas las personas de bien. Pero también con tres deseos claros para la agricultura del nuevo año.
No son deseos novedosos ni extraordinarios. Pero no por reiterativos son menos deseados por todos los profesionales que, de forma directa o indirecta, nos dedicamos a la agricultura y a sus necesidades.
Los tres deseos de MAFA para la agricultura del nuevo año estamos seguros de que también son deseos que, casi inconscientemente, piden millones de personas en el mundo. Porque la agricultura y su productividad sostenible nos preocupa a los que estamos relacionados con el sector. Pero también a toda la población que sigue creciendo y necesitando soluciones a su alimentación, cuya demanda crece de forma directamente proporcional.
Queremos coger el paraguas. U olvidárnoslo y que la lluvia nos moje. La dura sequía que afecta a los campos de nuestro país y gran parte del planeta ha reducido la producción agrícola a la mitad o menos en muchos cultivos y lastrado otros muchos. Y, aún así, los y las profesionales de la agricultura afrontan el nuevo año con sus mismos objetivos: producir alimentos, cuidando el paisaje y protegiendo el medioambiente.
Pero ese compromiso también necesita la ayuda de la meteorología, que, por desgracia, no está en nuestra mano controlar. Sí que es posible facilitar a los productores su trabajo. Y ahí el apoyo de las administraciones es fundamental. Como también es importante que la investigación siga trabajando en encontrar las mejores soluciones naturales y sostenibles a ese déficit hídrico que tan perjudicial puede llegar a ser para los cultivos.
Como ya hablamos en nuestro último post, la seguridad alimentaria ha de ser una prioridad. Es un objetivo complicado pero ha de ser el de todos nosotros: los gobiernos, la comunidad internacional tiene mucho qué decir y hacer al respecto, pero también es importante seguir poniendo las bases de una agricultura sostenible. Que proporcione alimentos para la creciente demanda de la población. Pero también que brinde la oportunidad de una agricultura de autoabastecimiento en aquellos puntos del planeta donde la pobreza llega a extremos que ni siquiera imaginamos en los países más desarrollados.
Como empresa dedicada a la investigación y el desarrollo de biosoluciones naturales para el campo no hay algo que deseemos más que seguir forjando alianzas con centros e instituciones dedicadas a obtener nuevas formas de atender las demandas de la agricultura actual.
Nos gusta analizar, estudiar, conocer qué ocurre en cada tipo de cultivo, en cada tipo de suelo… para poder desarrollar la solución más adecuada y, de esta manera, contribuir a que el rendimiento de cada campo sea el que el agricultor espera y, como no, el que el consumidor necesita.
